En las últimas horas se confirmó la muerte de Néider Ramos, un joven de 26 años conocido como ‘Monchi’, quien había permanecido bajo cuidados médicos desde la noche del pasado martes 11 de noviembre, cuando fue víctima de un ataque a bala en el barrio 11 de Mayo de Baranoa, Colombia.
Según las primeras versiones recopiladas por las autoridades, Ramos se encontraba en vía pública cuando fue sorprendido por varios sujetos que, sin mediar palabra, desenfundaron un arma de fuego y dispararon en varias ocasiones contra la víctima.
El joven recibió dos impactos, uno en la espalda y otro en el abdomen, lo que de inmediato comprometió órganos vitales.
Habitantes del sector, alarmados por las detonaciones, salieron de sus viviendas a auxiliarlo y trasladarlo rápidamente a la Clínica Reina Catalina, donde ingresó en estado crítico.
Desde entonces permanecía bajo observación, sometido a procedimientos y monitoreo constante por la gravedad de sus heridas.
Sin embargo, pese al esfuerzo del equipo médico y a las intervenciones realizadas, Ramos no logró recuperarse. Su fallecimiento fue confirmado la mañana de este jueves 20 de noviembre, generando conmoción entre familiares y conocidos.
La Policía Metropolitana informó que avanza en la recopilación de testimonios, revisión de cámaras de seguridad y análisis de información de inteligencia para establecer los móviles del atentado y determinar si el hecho estaría relacionado con disputas locales o con actores criminales que han operado en la zona.
Con esta nueva muerte violenta, la cifra de homicidios selectivos en Baranoa ascendería a 30 casos en lo corrido del año, un número que inquieta a las autoridades municipales y departamentales.


