El secretario general de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM) en Salina Cruz, Noé Pérez Urquidi, fue asesinado la mañana del lunes 27 de octubre en un ataque directo perpetrado por un grupo armado en inmediaciones del centro comercial Pabellón, en el municipio de Oaxaca, México.
De acuerdo con los primeros reportes policiales, el homicidio ocurrió poco después de que el dirigente sindical saliera de un restaurante donde había sostenido una reunión con empresarios y otros miembros del gremio. Los agresores abrieron fuego en múltiples ocasiones y huyeron del lugar sin ser detenidos. Ninguna otra persona resultó lesionada durante el atentado.
Ataque a plena luz del día
Testigos informaron que Noé Pérez Urquidi intentó correr hacia el estacionamiento para resguardarse, sin embargo, fue alcanzado por las balas y cayó sin vida junto a una camioneta blanca. Elementos de la Policía Municipal y de la Agencia Estatal de Investigaciones acordonaron la zona y realizaron el levantamiento del cuerpo, mientras peritos recolectaron al menos seis casquillos percutidos como evidencia.
¿Quién era Noé Pérez Urquidi?
El líder sindical asesinado era una figura reconocida dentro del movimiento obrero oaxaqueño. Al frente de la CATEM, representaba a cientos de trabajadores de los sectores transporte, construcción y servicios. Su organización ha tenido presencia en importantes proyectos impulsados por el Gobierno Federal, entre ellos el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, considerado uno de los planes de desarrollo más relevantes para el sur del país.
Compañeros y simpatizantes de la CATEM lamentaron el crimen y exigieron a las autoridades estatales y federales una investigación exhaustiva para castigar a los responsables del asesinato de Noé Pérez Urquidi.
Su muerte, señalaron, podría generar inestabilidad sindical en la región y afectar procesos de negociación colectiva entre trabajadores y empresas, por lo que insistieron en reforzar la seguridad de los representantes gremiales.




