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La respuesta de Ana

febrero 14, 2022

Una mujer llamada Ana Sandamil, acusada de quitarle la vida a su hija Desirée Leal, el 3 de mayo de 2019, ha usado su derecho a la última palabra, en el juicio que se lleva a cabo en la Audiencia Provincial de Lugo y que este lunes dijo: "No sé cómo pasó lo que pasó. Era la niña de mis ojos".

Esta mujer de 45 años, única acusada del hecho, ha afirmado en la sala que ella solamente quería que la pequeña, que tenía 7 cuando le quitaron la vida, dijo que independientemente del con quién, del cómo y del dónde este su hija, quiere que sea feliz.

Decía una y otra vez con llanto entrecortado, que ella quería a su hija, que para ella lo era todo y por eso jamás le haría daño. Añade que no recuerda lo que pasó esa noche, que su hija es lo mejor que le pasó y que tenían una relación muy estrecha.

Otras de sus reflexiones han sido; "Jamás actuaría así en mis plenas facultades. No soy así. No le hago daño a la gente. La quería con toda mi fuerza". Ha compartido con jurado popular, que todavía no cree "que no la pueda volver a ver".

En ese mismo orden, Luis Rifón, su abogado, expuso durante más de 20 minutos todas las razones por las que él consideraba que su clienta tenía las facultades anuladas en el momento de los hechos, por lo que le preguntaba al jurado "si no sería más justo que no fuera a cárcel y en vez de eso llevada a un centro psiquiátrico".

El letrado afirmó que la madre «tenía su juicio totalmente cegado», amparándose en las declaraciones aisladas de algunos de los psiquiatras que comparecieron en el juicio, y obviando la gran parte de los testimonios de los facultativos, que señalaban en la dirección opuesta.

Insistió ante el jurado que el trastorno que padece la señalada «está acreditado», y afirmó que «fue el único móvil que tuvo para quitarle la vida a su hija».

Sin embargo, el padre de Desirée Leal cuestiona que la acusada sufriera un brote psicótico. Estas fueron las palabras de José Manuel Leal observa el video: