Un niño identificado como Samuel Ramos Fraga, de apenas 2 años de edad, perdió la vida la noche del domingo pasado, en la casa de su tío en el municipio de Rafael Jambeiro, en el Centro-Norte de Bahía, Brasil.
Según la versión de los familiares, el pequeño estaba tranquilo en la sala de la casa jugando con su biberón o botella de leche, en la vereda Hacienda Santa Bárbara.
Mientras estaba jugando con su botella de leche, esta se le cayó de las manos y se fue rodando, quedando debajo de un armario dentro de una habitación que no se estaba utilizando.
Cuando el niño entró la mano para tomar la botella, también se encontró un pedazo de galleta. El bebé tomó la galleta, se la metió a la boca y se la comió.
El chico empezó a sentirse mal y al percatarse de ello, el tío le lavó la boca al niño, le dio leche y, junto con la madre, lo llevaron al hospital. Al poco tiempo de ser hospitalizado, se puso grave y falleció.
Luego descubrieron que junto a las galleta se habían colocado unas bolitas de veneno para eliminar ratas. Veneno que fue ingerido por la víctima y provocó su fallecimiento.
Los familiares fueron escuchados por la policía y, en testimonio, los padres eximieron al tío de cualquier responsabilidad. El caso será remitido a las autoridades competentes, quienes decidirán si acusar o no al tío del hoy occiso.